Avances y retos en el programa de seguridad del IMAAC: Un compromiso con la industria del aerosol

En la reciente convención del IMAAC, Ernesto Escoto ofreció un panorama detallado sobre el estado actual y futuro del programa de seguridad implementado por el instituto mexicano del aerosol. Este programa, que inició en 2003, ha sido clave para elevar los estándares de seguridad en una industria que, si bien tiene un impacto significativo en la economía, también enfrenta riesgos inherentes debido a los propelentes y compuestos químicos utilizados en la fabricación de aerosoles.

Un Retorno al Pasado para Entender el Futuro

“Para saber qué somos, necesitamos saber de dónde venimos”, comentó Escoto al inicio de su intervención. Reflexionó sobre cómo, al mirar el pasado y el presente, podemos tener una visión clara del futuro del programa de seguridad. En 2003, bajo la presidencia del ingeniero Víctor Morquecho, el IMAAC lanzó la primera edición del manual de seguridad, el cual se revisó y actualizó periódicamente, hasta llegar a su última versión en 2014. Escoto destacó la importancia de la primera edición, creada por Gino Nardini y Juan Nolasco, la cual marcó el inicio de un proceso de auditorías que posteriormente se transformaron en asesorías, con un enfoque más colaborativo y preventivo.

Desde su implementación, el programa ha ido evolucionando, adaptándose a las nuevas realidades del sector. En 2014, el IMAAC presentó una segunda edición del manual y comenzó a certificar a las empresas llenadoras de aerosoles en México, con un esquema de visitas de asesoría realizadas por un comité de seguridad altamente capacitado. Estas visitas no solo evaluaban las condiciones de seguridad, sino que también buscaban identificar áreas de oportunidad para mejorar y minimizar riesgos.

La Seguridad: Un Valor Fundamental

Escoto enfatizó que, en la actualidad, el principal objetivo del programa es proteger vidas humanas. La seguridad no solo se entiende como un conjunto de medidas preventivas, sino como una estrategia integral para fortalecer la industria. “Hoy México es el séptimo u octavo productor de aerosoles a nivel mundial, y eso se ha ganado a pulso gracias a demostrar que la industria mexicana del aerosol es confiable, segura y está lista para recibir inversiones”, afirmó.

Uno de los claros ejemplos, fue el incendio que consumió una fábrica de aerosoles en Tlaquepaque, Jalisco, en mayo de 2025. Según la investigación de la fiscalía, los trabajadores perforaron un lote de aerosoles con gas, devuelto por un cliente, para reutilizarlos. Sin embargo, al estar cerca de una fuente de calor, se produjo una ignición, causando el siniestro.

El Instituto continúa trabajando en el fortalecimiento de este programa. En este 2025, la guía de seguridad se ha revisado y ahora consta de cuatro secciones esenciales para brindar un marco de referencia claro. A la fecha, se han visitado tres empresas, y se espera que otras cuatro sean auditadas antes de que finalice el año

Los Beneficios de la Implementación: Testimonios de Empresas

El impacto positivo del programa de seguridad se ha visto reflejado en las empresas que ya han implementado las nuevas directrices. En su intervención, tres representantes de empresas como Envatec, ECOM y Truper compartieron sus experiencias con el programa, destacando los beneficios tanto en términos de seguridad laboral como de eficiencia operativa.

Jaime Verver de Envatec: Seguridad Como Pilar del Crecimiento

Envatec, una de las empresas más reconocidas en la industria del aerosol, fue una de las primeras en reintegrarse al programa de seguridad del IMAAC después de una pausa de 15 años. Jaime Verver, representante de la compañía, explicó que el principal motivo para reactivar el sistema fue la necesidad de adaptarse a las nuevas condiciones de seguridad, debido a los incidentes ocurridos en los últimos años. “Después de un periodo de inactividad en términos de auditorías de seguridad, comenzamos a notar que algunas de las instalaciones ya no estaban funcionando como deberían. Los incidentes, aunque no graves, nos indicaron que era momento de volver a revisar y actualizar nuestros protocolos», comentó Verver.

En su opinión, la implementación de este programa de seguridad no solo sirvió para detectar problemas inmediatos, sino también para fortalecer la cultura de seguridad dentro de la empresa. Destacó que los riesgos no siempre son técnicos, sino que a menudo están relacionados con el factor humano. “Los accidentes más recientes fueron causados por descuidos, no por fallos técnicos. Esto nos hizo entender que la seguridad no es algo que puedas dejar de lado una vez que el sistema está instalado. Requiere un seguimiento constante y debe ser parte de la rutina diaria”, indicó.

Verver también mencionó que el programa de seguridad no solo ha traído mejoras inmediatas, sino que ha ayudado a crear una mentalidad de mejora continua. “No solo se trata de corregir lo que está mal, sino de estar siempre vigilantes y buscar constantemente áreas de oportunidad. Esto es lo que nos garantiza una planta más segura a largo plazo”, afirmó. Además, hizo énfasis en la importancia de dar seguimiento a los cambios: “El primer paso es muy importante, pero la clave está en mantener lo que ya has implementado. Como en cualquier sistema de calidad, la revisión constante y el compromiso de todo el equipo son fundamentales”

Verver también habló sobre el futuro del programa, haciendo un llamado a otras empresas a unirse: “Este tipo de programas nos beneficia a todos, no solo a las grandes empresas. La seguridad industrial es responsabilidad de todos, y al implementar estas medidas estamos ayudando a fortalecer el sector en su conjunto. Aunque algunas empresas puedan pensar que nunca les ocurrirá un accidente, los riesgos están siempre presentes. Cuanto antes se sumen al programa, mejor será para la industria en general”, concluyó.

Lupita Almanza de ECOM: La Importancia de la Asesoría Externa

Lupita Almanza, representante de ECOM, compartió su experiencia sobre la implementación del programa de seguridad en la empresa, que ya contaba con un sistema interno de seguridad; sin embargo, se unió al programa del IMAAC para contar con una perspectiva externa que pudiera ayudar a identificar posibles omisiones y áreas de mejora. “Es importante para nosotros recibir asesoría externa porque nos permite ver las cosas desde una perspectiva diferente. A veces, al estar inmersos en el día a día, se nos escapan detalles que pueden resultar cruciales”, explicó Almanza.

Destacó que el enfoque del programa, basado en la colaboración y el acompañamiento, permitió que las recomendaciones hechas durante la visita fueran mayormente de forma, en lugar de fondo. “Las observaciones que recibimos no eran críticas, sino de ajuste, de pequeños detalles que nos permitieron mejorar sin tener que hacer grandes cambios en nuestras instalaciones”, comentó. La incorporación de estas recomendaciones, según Almanza, ha permitido fortalecer aún más el sistema de seguridad, complementando las políticas internas de la empresa. “Lo que nos trajo el programa fue la seguridad de que estamos siguiendo las mejores prácticas y que siempre habrá espacio para mejorar”, afirmó.

Uno de los principales beneficios de participar en el programa, según Almanza, fue el refuerzo de la cultura de seguridad dentro de la empresa. «En ECOM, la seguridad es un tema que viene desde la dirección. Al estar alineados con la visión del instituto, logramos fortalecer este compromiso en todos los niveles. La seguridad no es un proyecto aislado, es algo que todos debemos llevar a cabo día tras día”, dijo. Además, Almanza destacó el enfoque integral del programa, que se adapta específicamente a los riesgos de la industria del aerosol, lo cual hace que las empresas se sientan más identificadas con las medidas de seguridad propuestas.

Por último, resaltó la importancia de la estandarización del programa de seguridad en todo el sector: «La seguridad en la industria del aerosol debe ser una responsabilidad compartida. Es esencial que todas las empresas, grandes o pequeñas, participen en este tipo de iniciativas. Si logramos estandarizar estos protocolos, la industria en su conjunto será más segura y confiable», concluyó.

Víctor Peña de Truper: Crecimiento y Seguridad de la Mano

Truper, un gigante en la fabricación de herramientas, implementó el programa de seguridad del IMAAC hace poco más de un mes. Víctor Peña, representante de la compañía, explicó que la participación en el programa se debió a su f irme compromiso con la seguridad de sus colaboradores. “Desde que iniciamos nuestra operación en la planta de aerosoles hace dos años, nuestra prioridad siempre ha sido garantizar que la planta sea lo más segura posible. Sin importar el tamaño o la industria, la seguridad debe ser siempre la principal preocupación”, comentó Peña.

La empresa, que ha experimentado un crecimiento notable en los últimos años, pasó de fabricar 400,000 latas a más de 1.5 millones en tan solo un par de años. En este contexto, Peña destacó que la implementación de las auditorías de seguridad les permitió identificar áreas de mejora antes de que se convirtieran en un riesgo mayor. “Aunque nuestra planta es nueva y la infraestructura está en buena forma, siempre hay algo que mejorar. Por ejemplo, encontramos que algunas instalaciones eléctricas no estaban completamente alineadas con las mejores prácticas de seguridad, lo que es vital para evitar accidentes”, explicó.

A pesar de la juventud de su planta de aerosoles, Peña dejó claro que, incluso en una operación nueva, no se debe subestimar la importancia de la seguridad. “A medida que crecemos, enfrentamos nuevos desafíos, como la fabricación de nuevos productos y la expansión de nuestras líneas de producción. Cada nuevo producto tiene sus propios riesgos, y la seguridad debe evolucionar junto con nuestro crecimiento”, señaló Peña. Este crecimiento es una de las razones por las que Truper continúa buscando la asesoría del IMAAC, incluso después de la implementación inicial del programa.

El representante de Truper también destacó los beneficios de la capacitación y cómo la participación en el programa les permitió fortalecer su trabajo en equipo. “Una de las cosas que más nos benefició fue la oportunidad de unir a nuestro equipo multidisciplinario. Desde la preparación hasta la ejecución de la auditoría, todos los miembros del equipo trabajaron juntos, lo que generó una conciencia colectiva sobre la importancia de la seguridad”, comentó.

Peña también habló sobre cómo la implementación del programa impacta directamente en la confianza de los clientes. “Nosotros no solo estamos produciendo más, también estamos produciendo con seguridad. Esto nos ha permitido asegurar a nuestros clientes que nuestro proceso es confiable y que estamos comprometidos con la calidad de nuestros productos”, afirmó Peña. Finalmente, concluyó que, aunque Truper está satisfecho con los avances logrados hasta el momento, siguen comprometidos a seguir aprendiendo y mejorando: «La seguridad no es algo que se logra una vez, es un proceso continuo. Por eso seguimos trabajando junto al IMAAC para seguir mejorando día a día».

El Futuro de la Seguridad en la Industria del Aerosol

El futuro del programa es prometedor. El IMAAC se compromete a seguir promoviendo la conciencia sobre la seguridad en todas las empresas del sector. Sin embargo, Escoto subrayó que este es un esfuerzo voluntario y colaborativo: “El IMAAC no es una autoridad que sancione, sino un facilitador que busca generar conciencia”, explicó. Esta labor se apoya en la convicción de los empresarios que buscan mejorar y garantizar un entorno seguro para todos.

Además, el IMAAC tiene la vista puesta en expandir este modelo más allá de México. Jaime Verver mencionó que el programa ya está siendo considerado para otros países de Latinoamérica. Como presidente de FLADA, Verver subrayó que la experiencia de México podría servir como modelo para mejorar las condiciones de seguridad en la industria del aerosol en toda la región.

Conclusión: La Seguridad como Inversión

En resumen, el programa de seguridad del IMAAC ha demostrado ser una herramienta invaluable para las empresas del sector, no solo como un mecanismo de protección, sino como una inversión en el futuro de la industria. El mensaje es claro: “La seguridad no es un gasto, es una inversión que salva vidas y resguarda los activos de las empresas”. Las auditorías de seguridad, ahora vistas como asesorías, siguen siendo una vía vital para la mejora continua de las operaciones, asegurando que la industria del aerosol en México siga siendo competitiva, confiable y, lo más importante, segura.

Sin duda, los próximos años de implementación de este programa marcarán un hito en la historia de la industria del aerosol, consolidando a México como un referente en seguridad industrial.

Comentarios
Loading...