#DeRegresoaClases
El regreso a clases o con más dramatismo: “Final de la temporada vacacional”, es uno de los fenómenos sociales más divertidos de observar. Mientras que por un lado se presenta como la gran solución para algunos papás y la gran ilusión para algunos críos, para otros significa un cataclismo que cimbra los cimientos de la estructura familiar.
Dado que la probabilidad de que un niño lea esta columna es casi nula, nos enfocaremos a tratar de identificar ciertos hashtags representativos de esta temporada para los papás.
#uffporfin: Papás que ya no saben con qué familiar o persona de confianza, dejar encargados a los niños. Se las han visto color de hormiga este verano para que alguien los apoye cuidando y entreteniendo a sus hijos, ya que por motivos de trabajo no pueden estar con ellos durante la temporada de vacaciones.
#yagastémucho: Papás que hicieron un gran esfuerzo y se llevaron a sus vástagos de vacaciones unos días y que no contaban con que además de los gastos intrínsecos del viaje, tuvieron que cubrir con todos los extras y ocurrentes necesidades de los niños en el lugar de vacacionar. Desde orejas de ratón, disfraces, comida y bebidas no nutritivas, juguetes y souvenires que regresando se olvidan, entrada a juegos no incluidos en los paquetes y pases “todo incluido”, hasta campamentos de verano que les cuidaran a sus niños.
#yasevanacalmar: Papás que están a punto de un colapso nerviosos luego de convivir 24 horas diarias durante dos meses con los niños y que ya están felices de que ahora sus criaturas vayan y pongan al borde del colapso nervios a sus maestras de kínder o primaria. (Al fin que para eso se les paga).
#mihijitoyacreció: Papás que ya están sufriendo el desprendimiento de sus bebes, aunque tengan 15 años e ingresen a bachillerato, pero que sienten que aún están demasiado pequeños y que la vida “se les va de entre las manos” por lo rápido que pasa el tiempo. Tienen cierta nostalgia por los días en que los niños en vez de salir corriendo de casa para escapar de los mimos en extremo, lloraban al llegar al colegio e interpretaban escenas desgarradoras de separación entre madres e hijos.
#otravezlosgastos: Papás que saben que ahora con el regreso a clases, van a tener que comparar uniformes, libros, útiles y además de todo, se van a tener que poner varios fines de semana y noches a forrar cuadernos y rotular cada uno de los accesorios escolares.
#regresaeltráfico: Papás que saben que ya no van a poder tomarse un tiempo extra en las mañanas porque van a dejar a sus chiquillos a las escuelas o paradas de camión y saben que el tráfico se incrementa en un n%.
Pero papás, sea cual sea el hashtag con el que se identifiquen, no se preocupen. Relájense, gocen esta etapa de sus hijos, misma que va a durar unos 18 años en promedio y piensen que por otro lado, siempre habrá un profesor, maestra o instructor esperando el #porfinsefuerondevacaciones.
Para sus críos, bebés y demás criaturitas (algunas ya de 15 años): ¡Mucho éxito en este regreso a clases! La formación que reciban en su escuela y casa, será su herramienta en un futuro para abrirse un camino propio.